
Una de las lesiones más frecuentes asociada a personas de mediana edad, especialmente si tienen diabetes, párkinson o problemas de tiroides, es lo que conocemos como hombro congelado, también llamado hombro rígido doloroso o capsulitis retráctil, entre otros nombres.
Es una patología cuyas causas se desconocen pero que a menudo está ligada a accidentes o movimientos bruscos, enfermedades degenerativas o simplemente por el desgaste que provoca en las articulaciones el paso de los años. Es más frecuente entre las mujeres y en personas de más de 40 años, especialmente en aquellas que han sufrido una fractura o traumatismo del brazo y lo han tenido inmovilizado durante un largo período de tiempo. También puede aparecer como consecuencia de lesiones anteriores de hombros mal curadas.
En un primer estadio, esta patología provoca un fuerte dolor en el hombro, especialmente por la noche. Cuando entra en una segunda fase, que se conoce en fisioterapia como la fase de congelación, el dolor disminuye pero el hombro sufre rigidez y se mueve cada vez con más dificultad.
Para curar el hombro congelado existen diferentes tratamientos de fisioterapia. En la clínica Fidoos recomendamos los siguientes:
- Punción seca. Como actúa directamente sobre el punto gatillo, mejora de inmediato el dolor y la movilidad de la articulación. Se trata de una técnica no invasiva e indolora, en la que somos expertos.
- Electroterapia. Especialmente recomendada cuando el paciente sufre una gran inflamación de hombro.
- Ondas de choque.
- Masoterapia o masaje manual.
- Vendaje kinesiotape.
Foto destacada: lasaluddelguitarrista.com
AGO